Las vacunas han sido, son y serán un factor fundamental para la salud de la humanidad. De no ser por ellas, habríamos sido devastados por la viruela, la poliomielitis, el tétanos, el sarampión, la difteria, la coqueluche, la fiebre amarilla, la hepatitis B, por mencionar algunas. Y en la actualidad nuevas vacunas como las actuales como la vacuna del papiloma (HPV), harán un giro copernicano en la historia del cáncer de cuello uterino y todas las vinculadas a este virus, como el cáncer de pene, de vulva, de vagina, de ano, de boca y garganta,
Se estima que las vacunas han salvado a miles de millones de personas.
Aún quedan enfermedades por resolver mediante vacunas imprescindibles , como el SIDA, que está asolando a África. No vacunar contra una enfermedad potencialmente mortal es un crimen.
“FAKE NEWS” (Literalmente noticia falsa; que, como las brujas, que las hay las hay). Intentan oscurecer esta realidad. No hay contraindicación, salvo las especificas para cada una, no hay efecto colateral y no hay daño secundario.
El estudio dinamarqués de cohorte, publicado en la prestigiosa ANALS OF INTERNAL MEDICINE, revela que la triple vacuna contra sarampión, paperas y rubeola no conduce a autismo.
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